Aunque duele reconocerlo tienes que saber que tu problema no es el que crees que es.
Creemos muchas cosas, porque nos han contado cosas de nutrición, hemos visto dietas por ahí, hemos contratado incluso a «coaches de nutrición» … que nos han enseñado (o eso parece).
Y ves que, aunque hayas aprendido ciertas cosas, lo cierto es que no ves los resultados que quieres.
Seguramente hayas pasado alguna etapa en la que veías que sí lograbas resultados, pero luego volvías al mismo punto de partida. Y, hoy, lo sigues intentando. De todas las maneras posibles, pero ya estás cansado y es normal.
Debo decirte que, tu problema no es el que crees que es. No es que tengas ansiedad por el dulce, o que tengas poca fuerza de voluntad…
Te voy a contar algunos ejemplos de conversaciones, y cuáles son mis pensamientos.
Cuando me dices: “La teoría me la sé, sé lo que tengo que hacer”
Yo pienso: Pensamos que sabemos hacerlo, pero ¿Qué es comer bien?
Hay tantas formas de comer como personas en el mundo. Por eso siempre diré que la mejor dieta para ti lleva tu nombre y apellidos.
En cada persona, en cada etapa de la vida, los gustos, objetivos y necesidades son diferentes. Comer bien no es como siempre nos han contado. Lo que puede estar bien para mí, no es adecuado para ti.
Cuando me dices: “No tomo nada de grasas en casa”
Yo pienso: pues quizás es justo lo que tienes que hacer, comer más grasa.
O…
“Tengo ansiedad por el dulce”
Yo pienso: Claro, es normal tener ansiedad por el dulce porque tienes miedo a las grasas y crees que sabes comer.
En definitiva, tu problema no es el que crees que es. (Por cierto, si estás a dieta y no bajas de peso, estas son las posibles 10 razones)
No todo es comer pollo, pescado y verdurita. Eso no es comer bien, ni estar sano si sientes que no tienes equilibrio, si sigues teniendo antojos cada día o no te sientes bien en tu cuerpo.
Tu plato debe tener una buena estructura de nutrientes, tenemos que saber combinar los alimentos y aportar las cantidades adecuadas. Así nutres tu cuerpo de verdad y le haces más fácil el camino de adelgazar.
Eso sí, antes de nada debes reconocer tus 3 poderes para perder peso. Ya luego pasaremos a la siguiente fase. Aunque, si estás preparado, puedes adelantarte aquí.